Seguidores

domingo, 12 de agosto de 2012

Jamais.


Ha decidido dejar de ser una de esas mujeres que lloran haciendo el amor. Sinosuke debe conocer su turgencia, saber de su sensualidad y disfrutar de todo ello mientras abraza y es abrazada sobre él. Nunca más se dejará aplastar por un cuerpo. Ha llegado el momento de zanjar las ficciones y los disimulos. No queriendo  mostrar su vulnerabilidad se iba haciendo cada vez más vulnerable; hacer el amor no es dañarse, no es herirse, no es vengarse...

3 comentarios:

Garriga dijo...

suertudo el que se cruce en tu camino

Sara dijo...

en todo caso sería en el suyo...

Darío dijo...

El cuchillo entre los dientes...